Buscar este blog

jueves, 24 de abril de 2014

Huelga de Río Blanco, Veracruz

Río Blanco: crónica de un movimiento obrero textil
Por Roberto Espinosa de los Monteros
Investigador del INEHRM


Durante el régimen del general Porfirio Díaz, el sector industrial vivió un auge entre 1895 y 1910. Una de las principales industrias era la textil, que se desarrolló principalmente en el valle de Orizaba, en Veracruz. Hacia 1892, se fundó la fábrica de hilados y tejidos de Río Blanco, que a la postre se convertiría en la más grande del país. En los años siguientes, se crearon otras fábricas: Santa Gertrudis, Mirafuentes y Santa Rosa, San Lorenzo y Cerritos. Todas ellas pertenecían a ingleses, estadunidenses y franceses. Cientos de campesinos, artesanos, jornaleros y obreros provenientes de los estados de México, Puebla, Tlaxcala, Oaxaca y el Bajío integraron la mano de obra.
Las condiciones de los obreros eran precarias: jornada laboral diaria de 14 horas, con 45 minutos para tomar alimentos. Se comenzaba a laborar desde las seis de la mañana hasta las ocho de la noche. El descuento de salarios se aplicaba, además, si el trabajador averiaba la maquinaria, y en las tiendas de raya se vendían mercancías mediante vales que se descontaban de los exiguos salarios.
En 1903 ocurrió la huelga de Linares, llamada así por Vicente Linares, hombre arbitrario que al ser removido de la unidad textil de San Lorenzo a Río Blanco provocó el descontento y suspensión de labores. Este movimiento fracasó y los principales obreros que participaron en la protesta fueron despedidos.
En marzo de 1906, un militante del Partido Liberal Mexicano llamado José Neira llegó a la ciudad de Orizaba. Neira era un excelente obrero tejedor, por lo que entró a trabajar en la fábrica de Río Blanco, en donde laboraban 2350 obreros textiles más.
Las condiciones laborales contrastaban abruptamente. Mientras que los ingleses ganaban entre 37.50 hasta 41.75 pesos a la semana, los connacionales ganaban seis pesos semanales, que era el sueldo de un capataz, y los obreros, 35 centavos al día por agotadoras jornadas de trabajo entre 12 y 14 horas. Las mujeres ganaban no más de 25 centavos y los niños, tan sólo diez. A estos salarios debían descontarse semanalmente: vivienda, multas por retraso, descompostura de alguna máquina, vales de la tienda de raya y las inevitables fiestas religiosas.
El ambiente laboral comenzó a disgustar a los obreros, tres de ellos: José Neira, Porfirio Meneses y Juan Olivares, todos de filiación magonista, se reunieron con el pastor protestante José Rumbia, Manuel Ávila y Andrés Mota. Inspirados por las páginas del periódico Regeneración, que circulaba en Río Blanco, Santa Rosa y Nogales, creían necesario fundar una organización que defendiera a los obreros.
De esta manera, las reuniones acordaron la creación de una organización mutualista que finalmente nació el 1 de abril de 1906, a la que llamaron el Gran Círculo de Obreros Libres de Río Blanco (GCOL). Esta organización pugnó por defender "la implantación de la jornada de ocho horas de trabajo y mejores salarios". Como presidente fungió Rumbia, pero en la mesa directiva quedó representada la corriente magonista, ya que Neira se hizo cargo de la vicepresidencia y Meneses de la secretaría.
Durante el festejo del 5 de mayo, se llevó a cabo una reunión en Nogales. Neira exhortó a luchar "contra el capitalismo que los explotaba y hacía perder la vida al pie de las máquinas con jornadas inhumanas y sueldos miserables". Para hacer efectiva su lucha, se acordó fundar un periódico al que nombraron Revolución Social, del cual Neira sería director, y Meneses y Juan Olivares los divulgadores.
Otra reunión más se llevó a cabo el 13 de mayo, en donde se acordó fundar en Nogales la primera sucursal del GCOL. No obstante, al comienzo de una ardua y retadora actividad obrera, el suicidio de Manuel Ávila consternó a los trabajadores, por lo que Neira ocupó su lugar en la presidencia del Gran Círculo de Río Blanco el 27 de mayo. Radical en sus ideas, concluyó su discurso de toma de posesión señalando: "En caso de dificultades con las empresas, iremos a la huelga y si con la huelga nada conseguimos, recurriremos a la dinamita y a la revolución".
En el verano de 1906, apareció en Río Blanco el primer número de Revolución Social, que se publicaba en la Ciudad de México por Paulino Martínez y Jesús Martínez Carreón, activos militantes del PLM. El primer número contenía un artículo del propio Neira titulado "En la arena", en el que denunciaba: "la prensa gobiernista pinta con tan bellos colores no es otra cosa que un gran ingenio donde el obrero mexicano ha llegado a tan bajo de miseria que, fuera de los rusos y los chinos, es el obrero más miserable de todo el mundo".
La lucha obrera creció. El domingo 10 de junio quedó constituido el Gran Círculo de Obreros Libres de Santa Rosa, siendo electo presidente el magonista Samuel A. Ramírez. Al aparecer, tras la edición del segundo número de Revolución Social, el régimen porfirista, que estaba al tanto de su publicación, ordenó la aprehensión de Martínez Carreón, quien más tarde murió debido a la tortura. A pesar de la censura, el periódico alcanzó a distribuirse en su segunda entrega en Río Blanco.
Ante el acoso constante que el presidente Porfirio Díaz y su homólogo estadunidense Theodore Roosevelt ejercían contra los miembros del Partido Liberal Mexicano, Neira, Olivares y Meneses huyeron de la región, por lo que el movimiento comenzó a declinar. La presidencia del GCOL quedó en manos del incondicional a la empresa, José Morales, quien colaboró estrechamente con los representantes de la administración de Díaz. Esta nueva etapa se caracterizó por detenciones, encarcelamientos y destituciones de los principales obreros.
El malestar por la dirección de Morales no se hizo esperar y se pidió su destitución de la presidencia, que se efectuó el 19 de noviembre de 1906, recayendo la misma en Samuel A. Ramírez, quien no tardó mucho en ser destituido también. Por su parte, los patrones crearon el Centro Industrial Mexicano, en cuyo reglamento prohibió a los obreros de la región lo siguiente:
Recibir en su casa visitas de amigos o parientes, leer periódicos o libros que no sean previamente censurados y por ende autorizados por los administradores de las fábricas; aceptar sin reserva los descuentos en sus salarios para fiestas cívicas o religiosas, pagar el importe de las "canillas" y "lanzaderas" que se destruyan por cualquier causa; cumplir estrictamente con la jornada diaria y su horario de seis de la mañana a ocho de la noche, con derecho a disfrutar de tres cuartos de hora para tomar alimentos.
Ante esto, los obreros poblanos y tlaxcaltecas decidieron declararse en huelga el 4 de diciembre en total desacuerdo al llamado "Reglamento de noviembre". El 14 de diciembre, Pascual Mendoza y José Morales enviaron un telegrama a Díaz para que mediara en el conflicto. El Centro Industrial se reunió y tomó la decisión de un paro patronal. El 26, Morales y Mendoza se entrevistaron en Palacio Nacional con Díaz.
Para finales de diciembre de 1906, casi todos los establecimientos textiles del país estaban cerrados, y la crisis alcanzaba su máximo punto al afectar a cerca de treinta mil trabajadores.
El 4 de enero de 1907, el gobierno de Díaz emitió una sentencia favorable a los empresarios. En el laudo se conminaba a los trabajadores al regreso a sus centros de labores para el 7 de enero, con las prácticas que regían en los distintos establecimientos antes de la suspensión, y se obligaba a los patrones a estudiar un proyecto sobre las prestaciones y mejoras laborales.
El 6 de enero de 1907, en el Teatro Gorostiza de Orizaba, José Morales dio a conocer la noticia que molestó a miles de obreros de la región. El laudo era totalmente parcial a los intereses de los industriales, y se prohibía a los obreros los paros y las huelgas.
A la mañana siguiente, 7 de enero, a las afueras de la fábrica textil de Río Blanco, se aglomeró un grupo de personas con la intención de impedir el acceso de aquellos que quisieran regresar a las labores para dar cumplimiento al laudo. Los empresarios decidieron cerrar las fábricas, lo cual provocó que la muchedumbre dirigiera su ira contra la tienda de raya originándose un serio enfrentamiento que culminó con el saqueo e incendio del establecimiento.
Entonces, la muchedumbre enardecida se dirigió hacia la gendarmería, donde liberaron a los presos, para luego tomar dirección hacia Nogales. Durante el trayecto saquearon comercios, tres de ellos propiedad de Víctor Garcín, llamadas El centro comercial, El puerto de Veracruz y El modelo. En Nogales se dio el enfrentamiento con el 13er. Batallón al mando de José María Villarreal; las balas dispersaron, hirieron o mataron a la gente y otros más fueron encarcelados calculándose en cerca de doscientos trabajadores.
La noticia llegó a las autoridades estatales y federales, por lo que movilizaron un contingente de tropas al mando de Joaquín Mass, jefe de la Zona Militar de Veracruz. El 8 de enero otras tropas al mando de Rosalino Martínez, subsecretario de Guerra, arribaron a la zona conflictiva.
Para aplacar el movimiento, se llevaron a cabo fusilamientos sin formación de causa a los líderes obreros Ricardo Moreno y Manuel Juárez. Además, se enjuició a todos los encarcelados para determinar su participación en los hechos; los que lograron huir fueron perseguidos en las montañas. También se catearon las viviendas de los obreros en busca de simpatizantes y para recuperar los objetos saqueados.
El 13 de enero de 1907, se reiniciaron las labores en la fábrica de Río Blanco, notándose la disminución de obreros, ya que, según datos, se afirmó que de 2841 obreros que formaban la planta, sólo retornaron al trabajo alrededor de 2500; tres centenas de trabajadores tuvieron que huir del lugar amenazados, o bien fueron consignados, heridos o muertos. Los que quedaron en las cárceles eran miembros del Gran Círculo y fueron deportados a San Juan de Ulúa o a Quintana Roo.
Para el investigador Bernardo García Díaz, el significado de este movimiento radica en que contribuyó a erosionar la imagen del régimen porfiriano. El lugar de los hechos fue en el centro del país, muy cerca de la capital, en donde conmocionó a la opinión pública por lo cruento de la represión que afectó profundamente a la nación. Incluso, durante su campaña en Orizaba, Francisco I. Madero reconoció que los obreros deberían tener libertades para organizarse en "sociedades poderosas" a fin de poder defender sus derechos, y durante su gobierno toleró la militancia reivindicativa.

¡Estados Unidos en Veracruz!


Intervención de Estados Unidos a un siglo.


Así es, aunque no lo creas también fuimos participe de eso... por ello México se volvió un país con retraso en su desarrollo, impune, dependiente de Estados Unidos.



Los países más "adelantados" trataron de que el gobierno de México saliera adelante, y fue por eso que tuvo que pedir recursos económicos a los países más ricos de la orbe. Así llegaron los préstamos de países como Estados Unidos, Francia, España, entre otros. El país (recién nacido) empezó a funcionar, poco a poquito, fueron avanzando, hasta que, Nicolás Bravo, quiso derrocar a Guadalupe Victoria, pero fue vencido y expulsado por el ejército, encabezado por Vicente guerrero, terminando así su gobierno.

Todos los problemas que nuestro amado país presenta en este momento no es a causa de la falta de profesión de nuestros líderes u otros gobernantes sino es algo que viene desde nuestros antepasados pues, al liberarse del gobierno Español debieron organizar a nuestro país que había quedado devastado económico, político por consecuencia ingobernable. Así que como todo bebé, trata de imitar el hablar, caminar, etc.; El primer gobierno fue un imperio donde tomó lugar Agustín de Iturbide en 1823. Durante este tiempo, él se rodeó de lujos. Además que él cambiaba de postura de acuerdo a la situación que España y/o México iba jugando. Cabe mencionar que aceptó que Texas tuviera mano de obra barata y libertades para que los terratenientes tuvieran mayores riquezas.

Cuando Antonio de Padua María Severino López de Santa Anna y Pérez de Lebrón, un militar que participó de la lucha armada, se cansó de este imperio, decidió levantarse en armas, poniendo fin al imperio de Iturbide y proclamándose como primer presidente Guadalupe Victoria.
  
N1MA1824_cartac-a
 La Constitución de 1824
El nuevo Congreso Constituyente se reunió el 5 de noviembre de 1823, y el 7 de noviembre celebró su instalación formal. Para sus trabajos sirvió de recinto parlamentario el antiguo templo de San Pedro y San Pablo en el centro de la Ciudad de México. Después de su instalación formal, se abocó de inmediato a elaborar y aprobar el Acta Constitutiva de la Federación que lleva la fecha de 31 de enero de 1824, así como la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos, que se promulgó el día 4 de octubre de ese mismo año.
El Congreso Constituyente trató de conciliar en el texto las tendencias políticas existentes equilibrándolas. La Constitución de 1824 se estructura siguiendo la sistemática de la Constitución de Cádiz y establece un Estado Federal conforme a los principios constitucionales norteamericanos, pero de ninguna manera como copia irracional de aquélla Constitución. El federalismo se adaptó a la realidad de las provincias antes rebeldes. Pero también se reconoció la religión católica como de Estado y se mantuvieron los fueros militar y eclesiástico.

 
Vicente Guerrero
 El congreso lo nombra presidente de México en enero de 1829, cargo que ocupa sólo 8 meses durante los cuales afronta graves problemas como el suscitado por la expulsión de los españoles de México, el ofrecimiento de Estados Unidos para comprar Texas, a lo cual se opuso rotundamente y la guerra civil de Yucatán. En esas elecciones, fueron postulados Manuel Gómez Pedraza, y Vicente guerrero. El verdadero ganador fue Pedraza, pero Santa Anna saboteo las elecciones, y nombro a Vicente guerrero como presidente, quedando como vicepresidente, Anastasio Bustamante. Así, Santa Anna, le dice a Vicente guerrero que él quiere que el ejército tenga más recursos económicos, así como mayor y sofisticado armamento, pero al negarse, por falta de presupuesto, es asesinado por órdenes de Santa Anna. E impugna y coloca a Manuel Gómez Pedraza como presidente provisional, que era  la Logia Masónica Yorkina. Pedraza sólo dura 3 meses en el cargo.
Al ser nombrado presidente, en un hecho sorprendente, Santa Anna alegó mala salud y se retiró a su hacienda en Veracruz, desde donde planeó una supuesta invasión a Cuba. Entre 1833 y 1835, Santa Anna iba y venía del poder. En diversos periodos Valentín Gómez Farías ocupó la vacante de Santa Anna y aprovechó para hacer reformas liberales a la Constitución de 1824.
Santa Anna, presionado por una delegación de conservadores que no estaban de acuerdo con las reformas, volvió a la presidencia y disolvió el congreso, emulando la acción del Emperador Don Agustín I. Promulgo las Siete Leyes las cuales dieron paso a un periodo de conservadurismo, qué ocasionó varios levantamientos, de los cuales sólo tuvo éxito el texano.
http://www.sonofthesouth.net/texas/pictures/sam-houston_small.jpg
Su regreso a Veracruz, al ser liberado por los texanos, Santa Anna es destituido como presidente. Cuando los ciudadanos franceses le exigieron al gobierno mexicano una indemnización por los daños causados en la pastelería por las tropas de Santa Anna años atrás en sus negocios, no hubo respuesta por parte del gobierno mexicano, así que en 1838 mandaron una expedición que bloqueó a Veracruz y ocupó la plaza hasta que el daño fuera pagado. Santa Anna tomó de nuevo las riendas del ejército y se dirigió a Veracruz, donde hizo retroceder a los invasores hasta el muelle, pero en ese momento, los barcos franceses abrieron fuego de artillería contra los mexicanos, resultando herido en una pierna. Después de esto, hizo que se celebrara toda una ceremonia funeraria en honor a su pierna perdida. La gente se conmovió ante el sacrificio de Santa Anna, que perdió la pierna y lo aclamó como héroe de la Patria.
Esto le dio una gran publicidad, lo que le permitió ocupar la presidencia de nuevo en 1839, 1841 y 1844, anunciando ya el estilo totalitario que distingue su último periodo.
Al regresar de nuevo, Santa Anna sufrió un nuevo revés al suscitarse de nuevo la cuestión texana. Cuando en 1843, Estados Unidos planteó la incorporación de Texas a su territorio, Santa Anna intentó zafarse de la escena política para no sufrir descalificaciones de la opinión pública. Puso de pretexto la muerte de su esposa Inés García, para retirarse de la presidencia mientras pasaba el furor público por la anexión de Texas a la Unión americana. A los cuarenta días de luto por su mujer, Santa Anna volvió a casarse, escándalo que contribuyó a aumentar su descrédito en un momento en que se le recordaba su anterior episodio en Texas y se le pedían responsabilidades. El retiro de la escena política en ese momento lo pagó con un largo exilio en La Habana.
La situación interna en México estaba repartida entre hostilidades y caos político. Estados Unidos aprovechó esto para enviar sus tropas al río Bravo. Aunque el límite de Texas en ese entonces era el río Nueces, unos kilómetros más al Norte. Este movimiento ofensivo por parte estadounidense presionó y orilló al gobierno mexicano a defender la soberanía del territorio nacional, dándose así inicio a la guerra entre estos dos países. Santa Anna fue llamado a dirigir los esfuerzos nacionales de nuevo; pero aunque logró reunir y organizar un ejército sorprendente, fue derrotado por su falta de sensatez en todos los enfrentamientos contra los estadounidenses.
El conflicto armado se inició cuando el Presidente James Knox Polk quiso preservar el nuevo territorio adquirido (La República de Texas convertida en el Estado de Texas) enviando al ejército estadounidense, el cual debía apostarse en la supuesta frontera con México. El Presidente Estadounidense dio órdenes a sus tropas de traspasar el río de las Nueces hasta llegar al río Bravo. Texas, cuando aún era República, había intentado extender su frontera original (el río Nueces) hasta el río Bravo (que eran territorios del Estado Mexicano de Tamaulipas) mediante el Tratado de Velasco que había firmado el prisionero General Antonio López de Santa Anna y que no fue reconocido por México.
Los Territorios de Nuevo México, Alta California, Baja California y los Estados de Coahuila, Veracruz, Puebla y el Estado de México; fueron ocupados. A los puertos marítimos de otros Estados se les aplicó un bloqueo naval. El Ejército Mexicano estaba al mando del General Antonio López de Santa Anna hasta la final ocupación de la capital de la República. Dando término a las acciones bélicas se firmó el Tratado de Guadalupe Hidalgo donde México reconoció la independencia de la República de Texas, fijaba la frontera de ese Estado en el río Bravo y aceptaba la venta de los territorios de Alta California y Nuevo México a Estados Unidos a cambio de quince millones de pesos.
 
 Casi logró una victoria en la Batalla de la Angostura; pero se retiró inexplicablemente a un paso de derrotar a Taylor. Después en su natal estado de Veracruz fue derrotado en la Batalla de Cerro Gordo. Después de evacuar la capital del país, Santa Anna se exilió de nuevo, esta vez en Colombia. Mediante el Tratado de Guadalupe Hidalgo, México perdió los estados de California, Nuevo México, Arizona, Nevada y Colorado a favor de Estados Unidos, que se comprometió a pagar una indemnización de 15 millones de dólares a México. Los conservadores fueron imponiéndose en la mayoría de los estados y reclamaron de nuevo el regreso de Santa Anna. Santa Anna era el único que había demostrado, al menos, tener la suficiente fuerza para gobernar un país tan ingobernable y que en ese momento en algunas partes estaba sumido en el caos. Así en 1853 Santa Anna es nombrado presidente de nuevo. Carente de prejuicios e inmune a las críticas de sus adversarios, instituye una medida para obtener dinero, vende un trozo de territorio a Estados Unidos, La Mesilla. Hizo volver a los jesuitas expulsados por los españoles en la colonia, reinstauró la Orden de Guadalupe y se hizo llamar Alteza Serenísima a la vez que decretaba una ley para nombrarse dictador vitalicio. En su empeño por legislar, ningún asunto político escapó de sus designios: los impuestos afectaban a los perros de compañía y a las ventanas de las casas, dictaminó el color de uniforme de los empleados públicos, construyó innumerables monumentos auto dedicados por todo el país y concentró todo el poder en su persona. Paulatinamente creció el descontento popular y con él comenzaron a fraguarse los planes de rebelión.

Aquí algunos otros datos!!

1º DE MARZO DE 1845

El Presidente norteamericano John Tyler firma la ley de la agregación de la República de Texas con límites al sur hasta el río Bravo. Aunque México nunca reconoció la independencia de Texas, sí había confirmado el río Nueces como el límite sureño de ésta. El proyecto de ley sobre la agregación de Texas fue aprobado después de largos y acalorados debates; en la Cámara de Representantes el voto fue de 120 a favor y 18 en contra; en el Senado lo fue de 27 a favor y 25 en contra.

4 DE MARZO DE 1845

James K. Polk llega a la Presidencia norteamericana. Elegido en noviembre del año anterior, durante su campaña puso énfasis en el establecimiento de una nación continental. Polk, la personificación política de la ideología del Destino Manifiesto, anuncia en su mensaje de toma de posesión que la agregación de la República de Texas es una decisión mutua entre dos naciones independientes -Estados Unidos y Texas- y no entre su país y México.

31 DE MARZO DE 1845

El Presidente José Joaquín de Herrera, como rechazo a la ley de la agregación de Texas a Estados Unidos y a su expansionismo, rompe relaciones diplomáticas con Washington. De inmediato da órdenes para la defensa de la Patria.

JULIO DE 1845

El general Zachary Taylor, bajo las órdenes del Presidente Polk, dirige la salida de la tropa norteamericana de Nueva Orleans y su destacamento en Puerto Isabel, cerca de Corpus Christi, entre los ríos Nueces y Bravo.

16 DE SEPTIEMBRE DE 1845

En México Herrera jura como Presidente constitucional. En Estados Unidos el Presidente Polk decide nombrar a John Slidell, honorable de Nueva Orleans, ministro diplomático para México.

15 DE OCTUBRE DE 1845

El Presidente Herrera acepta el nombramiento de Slidell como ministro diplomático.

30 DE NOVIEMBRE DE 1845

John Slidell llega a Veracruz y se dirige a México con la misión de fijar, por la vía diplomática, los límites entre Texas y México en el río Bravo y conseguir el traspaso a Estados Unidos de Nuevo México, el norte de Sonora y Alta California.

9 DE DICIEMBRE DE 1845

Bajo el pretexto de una exploración científica, el coronel John C. Fremont, del Cuerpo Topográfico del Ejército de Estados Unidos de América, con un cuerpo de rifleros, llega a Sutter's Fort, Alta California.

14 DE DICIEMBRE DE 1845

Mariano Paredes y Arrillaga, general de la División del Norte, destacado en San Luis Potosí para organizar la tropa y marchar a la frontera para defender el territorio mexicano, se pronuncia en contra del gobierno del Presidente Herrera y parte de San Luis Potosí a la Ciudad de México. Este mismo día se nombra al general de división Pedro Ampudia para el mando de la División del Norte. Asimismo, se nombra al general de brigada Francisco Mejía para el mando de la tropa en Matamoros.

29 DE DICIEMBRE DE 1845

Se admite a Texas como entidad de Estados Unidos de América.

30 DE DICIEMBRE DE 1845

Mediante la revolución de la Ciudadela, el Ejército en la Ciudad de México se pronuncia a favor de la rebelión de Paredes y Arrillaga.

31 DE DICIEMBRE DE 1845

Es depuesto el Presidente Herrera.

4 DE ENERO DE 1846

Paredes y Arrillaga presta juramento como Presidente interino.

3 DE FEBRERO DE 1846

Taylor, ya en Corpus Christi, recibe órdenes de avanzar hasta el río Bravo. Este mismo día se nombra general de brigada a Anastasio Torrejón para remplazar a Mejía en Matamoros.

5 DE MARZO DE 1846

Fremont establece su destacamento en Gavilan Peak, Alta California.

12 DE MARZO DE 1846

Tras el rechazo de su misión ante el gobierno de Paredes y Arrillaga, Slidell sale de Veracruz hacia Nueva Orleans.

23 DE MARZO DE 1846

Taylor llega a Puerto Isabel con cuatro mil efectivos. Establece un nuevo destacamento, "Fort Texas", sobre el río Bravo, frente a Matamoros.

Otros Sitios interesantes
http://www.uv.mx/resultados.html?q=veracruz+en+la+independencia

Y por último una película... la cual nos muestra como nuestra raíz fue cambiando debido a la interculturalidad que fue sometida provocando una interacción multicultural cosmopolita.

miércoles, 23 de abril de 2014

Veracruz en la Independencia

A lo largo de los tres siglos de dominio español hubieron varios estallidos sociales en la Nueva España.

Esta rebelión fue a causa de la desigualdad, ya que un grupo muy pequeño de personas que controlaban la mayor parte de la riqueza, mientras que la gran parte de la población era pobre o quizás por que los pueblos indígenas debían pagar un tributo al gobierno y estaban sujetos a un régimen de autoridad que, por ambiguo, provocaba numerosos enfrentamientos entre españoles peninsulares, criollos y mestizos. Muchos de estos enfrentamientos tenían relación con cuestiones agrarias, como por ejemplo la tenencia de la tierra y el control del agua.


Entre ellos la rebelión del Negro Yanga en Orizaba

El Estado de Veracruz es el escenario histórico que determina el fin de la colonia española. El 30 de julio de 1821 llega al puerto el nuevo virrey Juan de O’Donojú, el pronunciamiento de Iturbide se hallaba extendidó por la provincia veracruzana y Santa Ana había intentado ocupar sin éxito la plaza portuaria.   La clase comerciante no simpatizaba con la Independencia. El reciente Virrey era de tendencia liberal, conciente de la crisis de la corona española, decidió emprender los tratos para que la emancipación se efectuara definitivamente de manera pacífica, por lo cual contacto con los independentistas y escoltado por Santa Anna, viajó a la Villa de Córdoba, firmando en el Hotel Zeballos los Tratados de Córdoba con Agustín de Iturbide, en los cuales se reconoce a México como imperio independiente que sería gobernado por un monarca constitucional, sucediendo esto el 24 de agosto del año mencionado.
Antonio López de Santa Anna, Comandante General de la provincia de Veracruz, expidió en Xalapa la proclama  publicando el decreto del Congreso Constituyente,  se instituía el Primer Imperio Mexicano con Agustín de Iturbide, como  Emperador, este hecho propició la inquietud y la división de opiniones de los distintos grupos sociales de la entidad.
El país atravesaba por una etapa crítica,  la presencia de las tropas españolas que ocupaban San Juan de Ulúa contribuían a empeorarla,  impedían el comercio y hostigaban a la plaza. En 1822, Santa Anna se rebeló en el puerto de Veracruz y proclamó la reinstalación del Congreso, mostrando simpatía hacia la República; como militar criollo y antiguo realista,  logró la aceptación de la diputación provincial, de los comerciantes y de los caudillos Bravo, Guerrero y Victoria.
Victoria y Santa Anna firmaron el Plan de Veracruz, en el cual sostenían como única forma de gobierno para México, el sistema republicano y pactaron la paz con los ocupantes de Ulúa, último reducto español; Victoria se estableció en Puente Nacional, mientras que Santa Anna combatió en Xalapa, Plan del Río y Sotavento hasta que fue sitiado en el puerto de Veracruz por las tropas del iturbidista Echavarri.
En 1823 Santa Anna proclamó el Plan de Casa Mata, que desconocía a Iturbide como emperador y proponía la adopción del sistema republicano.
Guadalupe Victoria había tomado posesión desde el día 1º de enero de 1824, como Gobernador Militar de Veracruz; en febrero las autoridades veracruzanas publicaron y juraron el Acta Constitutiva de la Federación, en el mes de mayo, la Legislatura Local se instaló en Xalapa. Victoria tuvo que regresar a la ciudad de México y fue substituido, quien rindió su protesta como Primer Gobernador del Estado en junio del mismo año, fué Sebastián Camacho, abogado y diplomático quién funda en Xalapa, el periódico “El Oriente” en 1824. La Legislatura Veracruzana formulaba la Constitución Local, aprobada en junio de 1825.
En 1826 se concede a la ciudad de Veracruz, el título de Heróica por la defensa en 1823 al expulsar tropas españolas de la fortaleza de San Juan de Ulúa.
San Juan de Ulúa
En  1838 el gobierno francés reclama a México el pago de indemnizaciones a favor de comerciantes franceses establecidos en la capital del país, atribuyendo grandes pérdidas por la rebelión de la Acordada en 1828, cuando se enfrentaban las logias masónicas, ante la negativa de nuestro nación se produjo la ruptura. Uno de los comerciantes que solicitaba restitución de los daños era Remontel, dueño de una repostería del rumbo de Tacubaya; por lo cual popularmente se le denominó a este conflicto internacional, como la guerra de los pasteles.  Durante el mes de marzo  varios buques franceses anclaron frente a Antón Lizardo, en donde pasaron a la isla de Sacrificios, bloqueando el puerto, al frente de esta flota estaba el baron Deffaudis, enviando el día 21 del mes señalado anteriormente, un ultimátum al gobierno mexicano, exigiendo una indemnización de 600,000 pesos, como condicionante para reanudar las relaciones entre las dos naciones.
Ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo el Ministro del Interior, comunicó durante el mes de noviembre al puerto de Veracruz, la necesidad de defender el territorio nacional. En Xalapa se efectuó el diálogo entre  el ministro mexicano Cuevas y el contraalmirante francés Charles Baudin, sin mediar ningún acuerdo el 27 de noviembre la flota francesa bombardeó a San Juan de Ulúa, capitulando Antonio Gaona, gobernador de la fortaleza mexicana.  Ante esta gran pérdida el gobierno federal instruye a Santa Anna para recuperar la plaza, mediante un ataque en la madruga del 5 de diciembre, respondiendo con cañonazos que otra vez sumieron a la fuerzas mexicanas, es en esta batalla que Antonio López de Santa Anna pierde una pierna.
En 1846 Estados Unidos declaró la guerra a México; ésta situación afectó directamente al Estado, el Puerto de Veracruz fue bloqueado por los Norteamericanos. Juan Soto se hizo cargo de la administración veracruzana y comunicó a Mariano Rincón para organizar la defensa de Puente Nacional, Plan del Río, Cerro Gordo, La Joya y Las Vigas.
Más tarde una flotilla norteamericana intentó, sin éxito, desembarcar dos veces en Alvarado. La acción definitiva sobre la costa del Golfo se produjo a principios de 1847, otra escuadra enemiga llegó a isla de Lobos, después se inicio el desembarco frente a Collado. Ante estos sucesos, Santa Anna se trasladó a Xalapa y se instaló en Cerro Gordo donde fue derrotado. Debido al avance norteamericano, la Legislatura Local decretó que el Gobierno Estatal, debía trasladarse a Huatusco. Los norteamericanos permanecieron en Xalapa hasta junio de 1847, fecha en el que el Ayuntamiento solicitó el retorno de los poderes del Estado a esta ciudad, para organizar la administración pública.
La fachada del edificio de la Escuela Naval
En 1855 se inicia la construcción del Palacio de Gobierno, en el lugar que ocuparon las casas Consistoriales y el Hospital de la Inmaculada Concepción.
Ignacio de la Llave y José Mariano Rosales, iniciaron la rebelión en Veracruz, extendiéndose en toda la entidad;  para el ejército santanista resultó imposible deternerla, poco después Santa Anna salió de la ciudad de México hacia Veracruz con el pretexto de dirigir desde ahí las operaciones militares y restablecer el orden público, pero en Perote expidió un manifiesto en el que se despidió de la Nación, después se embarcó en el Vapor Iturbide, que lo condujo al exilio.
En junio la Legislatura Local se instaló en el Puerto de Veracruz, en el mismo mes expidió un Decreto declarando Gobernador del Estado, a Manuel Gutiérrez Zamora, quien surgió con la reorganización económica y política, promulgando la Constitución Local, en noviembre de 1857.
La ciudad de Veracruz es designada en 1858 por primera vez, sede de los poderes federales; el 4 de mayo arribó el barco Tenesse y se distinguián entre sus pasajeros a Benito Juárez, Melchor Ocampo, Manuel Ruiz, León Guzmán, Guillermo Prieto y Matías Romero; este importante grupo eligió este estado basado en varias facilidades estratégicas entre ellas que el Gobernador Manuel Gutiérrez Zamora, era un connotado liberal; el control de la aduana del puerto más importante del país habría la posibilidad de allegarse de recursos, el acceso a la capital y las comunicaciones con el exterior.
La llegada de Juárez y los destacados liberales fue celebrada con 21 cañonazos y con grandes vallas, celebrandóse  en la casa de gobierno de la calle de Puerta Nueva una ceremonia oficial, al día siguiente Melchor Ocampo, Ministro de Gobernación comunicó en la plaza la instalación oficial del gobierno constitucional, permanenciendo hasta 1860.
Benito Juárez expide la Ley de Nacionalización de Bienes Eclesiásticos, Ley de Matrimonio Civil, Ley Orgánica del Registro Civil y otras disposiciones conocidas como Leyes de Reforma. Como dato la primera acta levantada en el Registro Civil asentado en Veracruz es la de la hija de Benito Juárez.
El General Ignacio de la Llave, liberal destacado, durante la guerra de Reforma se hizo cargo del Gobierno del Estado.
El 10 de julio de 1863, el Gobernador Francisco Hernández y Hernández expide el Decreto mediante el cual el Estado se denomina Veracruz-Llave.
En mayo de 1864, Maximiliano llegó al puerto de Veracruz, en compañía de su esposa, la princesa Carlota Amalia.
Le correspondió a Ignacio L. Alatorre, Gobernador provisional y Comandante militar de Veracruz, restablecer el gobierno republicano en el Estado. Se mejoraron las rutas de Veracruz al altiplano, el servicio postal y se incrementaron las comunicaciones ferroviarias. Se tendieron las primeras líneas telegráficas entre el puerto de Veracruz, Xalapa, Perote, Córdoba, Orizaba y otras ciudades.
Para 1873, la industria y comercio veracruzano mostraron alguna mejoría gracias a las medidas económicas tomadas durante la Reforma y se estableció el banco Agrícola e Industrial de Córdoba.
El 4 de mayo de 1878, el gobernador Luis Mier y Teherán expide el Decreto que traslada los Poderes del Estado a la ciudad de Orizaba.
José Manuel Jáuregui, Gobernador Provisional expide el Decreto que ordena el traslado de los Poderes del Estado a la ciudad de Xalapa; el 4 de junio de 1885.
Manuel Levi, Gobernador Provisional expide el 30 de marzo de 1892, el Decreto que establece que la capital veracruzana se llame Xalapa-Enríquez.
A fines del siglo XIX las principales poblaciones eran Veracruz, Orizaba, Xalapa, Córdoba, Jalacingo, Chicontepec y Tantoyuca.
Por Decreto Presidencial del 21 de abril de 1897, se funda la Heróica Escuela Naval en el Puerto de Veracruz, a iniciativa de José María de Vega, Jefe del Departamento de Marina.
Durante el porfiriato fueron gobernadores de Veracruz, entre otros, Luis Mier y Teherán, Juan de la Luz Enríquez y Teodoro A. Dehesa.
En 1898 la Legislatura del Estado concede a la ciudad de Veracruz por segunda y tercera ocasión, el título de Heróica por la defensa de 1838 contra los franceses y por la defensa de 1847 contra los norteamericanos, respectivamente se habían establecido en Veracruz despepitadoras de algodón, ingenios molinos, fábricas de hilados y tejidos, papel, puros y cigarros.
La explotación del petróleo, se convirtió en el principal atractivo para los empresarios extranjeros, se otorgaron facilidades para importar la maquinaria necesaria para sustracción, Veracruz llegó a ser el centro de operaciones, principalmente de compañías norteamericanas e inglesas, como la Huasteca Company Petroleum y el Águila, las que llegaron a dominar una extensa zona petrolera que comprendía los estados de San Luis Potosí, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco y Chiapas.
La obra  más importante fue el ferrocarril Interoceánico que enlazó a Veracruz con la capital de la República, y pasaba por Xalapa, Perote y Puebla. A finales del siglo XIX se introdujo al Estado la energía eléctrica y el servicio telefónico, también mediante contratos con empresarios extranjeros.
Antigua Estación del Ferrocarril Interoceánico
El Gobernador Apolinar Castillo fundó la Escuela Modelo de Orizaba.  En 1885, el Gobernador Juan de la Luz Enríquez inauguró ahí La Academia Normal para Profesores. El 24 de agosto de 1886 se creó en Xalapa, la Escuela Normal Veracruzana, bajo la dirección de Enrique C. Rébsamen.
Durante el gobierno de Luis Mier y Terán se produjeron varias rebeliones en Chocamán, Coscomatepec, Santiago Tuxtla, Xalapa y el Puerto de Veracruz debido a la política agraria y laboral que prevaleció en el porfiriato, pero fueron brutalmente reprimidas. Los obreros de las fábricas textiles de Orizaba realizaron huelgas en 1896, 1898 y 1903 e iniciaron al igual que otros, a formar sociedades mutualistas, y luego cooperativas y finalmente sindicatos. A pesar del nuevo reglamento elaborado por Porfirio Díaz y el Gobernador Teodoro A. Dehesa, el problema se agudizó a principios de 1907 ya que trabajadores de Puebla y Tlaxcala iniciaron una huelga general, a la que se sumaron los de Orizaba y Río Blanco, acontecimiento que tuvo un desenlace fatal donde muchos obreros fueron asesinados.



Veracruz en la colonia

XALAPA Y SUS ALREDEDORES
Época Colonial
Los primeros ibéricos que llegaron a Xalapa fueron Hernán Cortés y sus soldados, quienes arribaron a la población el 17 de agosto de 1519, en viaje de la costa veracruzana a Tenochtitlan. La región estaba escasamente poblada, pero la llegada de los españoles marcó el inicio de una serie de cambios paulatinos, origen de su futuro auge y desarrollo. El caserío quedó como punto de paso de conquistadores y colonos. Desde entonces, los caminos que enlazaban la capital novohispana con el Puerto de Veracruz tuvieron singular relevancia en el control de las rutas comerciales.
Para 1553, fecha en que Antonio de Mendoza, primer virrey, llegó a gobernar la Nueva España, Xalapa se consideraba como punto de escala necesario, y con el tiempo adquirió mayor importancia porque el calor y la insalubridad tradicionales del puerto de Veracruz obligaron a viajeros, políticos, militares y comerciantes a utilizar este poblado como residencia temporal.
Una vez efectuada la conquista de México, los religiosos españoles procuraron la conversión de los indígenas a la religión cristiana. Con ese fin se fundó en Xalapa, en 1555, el convento de San Francisco, donde hoy se encuentra el parque Juárez.
CatedralLos españoles destruyeron los templos indígenas levantando en su lugar templos cristianos. Así fue como se construyeron El Calvario, en Xallitic; San José de la Laguna en Techacapan, y Santiago en Tlalnecapan. En el centro de las cuatro poblaciones se construyó la iglesia de Santa María de la Concepción, que es hoy la catedral de la Arquidiócesis de Xalapa.
En el aspecto político, Xalapa, por su condición de pueblo indígena encomendado a la corona española, y debido a la importancia económica que adquiría, se convirtió en corregimiento y luego en cabecera de la alcaldía mayor. Es probable que éstas hayan comenzado a ejercer entre 1531 y 1535.
Las primeras expediciones españolas intercambiaron mercaderías europeas con los indígenas. Entre quienes acompañaban a Hernán Cortés venían dos soldados y comerciantes que dejarían su huella en Xalapa: Jerónimo Pérez de Salazar a quien apodaban "El Lencero" y Juan Sedeño. El primero estableció una venta en el camino nacional que conducía a la costa veracruzana; el segundo fundó otra junto al río Quetzalapa. La gran cantidad de productos de la región, los innumerables oficios que se creaban y las condiciones inmejorables de la ruta Veracruz-México brindaron a los comerciantes xalapeños la oportunidad de establecer vínculos con los del Altiplano y los del puerto de Acapulco, y traficar con bienes de Filipinas, China y Japón. El resultado final fue el nacimiento de un movimiento mercantil local que con el transcurso del tiempo fue cobrando cada vez mayor fuerza. Esta prosperidad mercantil se vio reforzada por los ataques piratas al Puerto de Veracruz, lo que convertía a Xalapa en un lugar más seguro.
Cuando empezó a crecer el comercio entre Europa y la nueva colonia española, la apertura de la ruta México-Orizaba-Veracruz restó importancia a Xalapa como lugar de tránsito, haciendo que su población se mantuviera casi estacionaria durante el siglo XVII.
De ese estancamiento la sacó la primera "Feria de Xalapa", celebrada en 1720, a la que siguieron otras gracias a las cuales el pueblo adquirió cada vez más importancia al recibir la afluencia de numerosos comerciantes de la Nueva España que llegaban a vender sus productos y a comprar los procedentes de la península ibérica.
La feria se realizaba en la Plaza del Rey (ubicada donde hoy se encuentra el Mercado Jáuregui), donde también se celebraban las juras de las autoridades, lo que propició edificaciones y establecimientos de toda índole, desde la casa de gobierno hasta hostales y posadas. Durante esta época San Francisco (el centro) quedó unido con los barrios indígenas. La ciudad recibió entonces el nombre de Xalapa de la Feria. Esta celebración comercial se realizó hasta 1788 y en total fueron dieciséis las ferias organizadas.
El crecimiento de Xalapa en población, cultura y comercio registrado durante el siglo XVIII hizo que los habitantes pidieran al virrey Juan Vicente Güemes Pacheco Padilla, segundo conde de Revillagigedo, que solicitara al rey Carlos IV de España la elevación de la población a la categoría de villa. La solicitud fue atendida por el monarca español, quien concedió el título de villa y autorizó el Escudo de Armas, mediante Reales Cédulas expedidas el 18 de diciembre de 1791.
 http://www.uv.mx/congresoingenieria/turistica/colonial.html

SIGLO XVIII
Dos siglos después de la conquista, los asentamientos urbanos, suburbanos y rurales alcanzaron un notable desarrollo en Nueva España. En Veracruz españoles y mestizos mostraron un claro progreso, mientras que los indígenas durante los siglos XVI y XVII habían perdido una gran parte de su población.
La consolizadación de la plaza comercial veracruzana se logró durante este siglo, dejó de ser la puerta de entrada o salida de productos, para detonar su papel como  centro de intercambio y distribución de los mismos, el desarrollo de estas actividades comerciales propiciarón la emergencia y apoderamiento de la clase social integrada por comerciantes de origen criollo y peninsular, el cual se culmina hasta finales de la centuria, cuando se logra el Consulado en el Puerto de Veracruz.
Desde principios de siglo los ingleses  trabaron relación comercial con la Nueva España, primero a través de la pirateria y el contrabando, posteriormente lograron la firma del tratado de Utrech en 1713, en el cual se autorizaba a Inglaterra a envíar un barco anualmente con un cargamento de 500 toneladas para comerciar con las colonias españolas.
Golfo de México
Es en los últimos veinticinco años del siglo, con la promulgación del decreto de Libre Comercio de 1778, se superaron las trabas de Cádiz y el sistema de flotas, cimentándose los comerciantes veracruzanos, lo cual se tradujo en un incremento de intercambio con Europa y se expandió el Virreinato novohispano, y se logra el reconocimiento  a la relevancia e influencia que había alcanzado el Puerto Veracruzano.
En 1774 y 1791 Orizaba y Xalapa, respectivamente fueron elevadas a la categoría de villas,  siendo de las más importantes al igual que el Puerto de Veracruz; de menor importancia figuraron Pánuco, Tamiahua, Tuxpan, Misantla, Tlacotalpan, Córdoba y San Andrés Tuxtla.
En el siglo XVIII las principales actividades económicas fueron la agricultura, la ganadería y el comercio; en 1720, Xalapa organizó la primera feria con las mercancías traídas de ultramar, la cual dio un impulso al desarrollo económico, político y cultural de la futura capital veracruzana.
En 1746 el territorio veracruzano estaba dividido en jurisdicciones civiles: Pánuco, Tampico, Huayacocotla, Huauchinango, Papantla, Misantla, Xalapa, Jalacingo, Veracruz, Córdoba, Orizaba, Cosamaloapan, Tuxtla y Cotaxtla
La fortaleza de San Carlos en Perote se proyectó en 1760-1766, se propuso al Rey para almacenar provisiones, armamentos y socorros, se aprobó en 1769, se inició  su construcción el 25 de junio de 1770, la dirigieron los ingenieros Miguel Corral y Manuel de Santiesteban y se concluyó en 1777.
En Veracruz se realizaron varios intentos  infructuosos por  introducir el agua, el franciscano Fray Pedro Buseta diseñó un sistema  de acueducto, el cual permitió que las aguas de la laguna de Malibrán satisfacieran las necesidades de la ciudad; sin embargo, este abastecimiento  no fue suficiente, siendo necesaria la construcción de la obra que surtiera las aguas del río Jamapa al Puerto de Veracruz, dicha obra fue autorizada el 8 de enero de 1789,  y su presupuesto se logró hasta el 23 de diciembre del mismo año, con un arbitrio de dos pesos para ella,  por mandamiento del Conde de Revillagigedo.
En diciembre de 1791 don Antonio Ventura de Taranco expide título de Villa a favor de Xalapa,  a causa de un error se expide nuevamente el 22 de junio de 1793, este reemplazó al primero.
Es imposible dejar de mencionar la Ciudad Amurrallada concluida en 1793. La obra de amurrallado consistía en una muralla de cuatro varas de alto por una de espesor contaba con nueve baluartes, los dos de mayor antigüedad miraban al mar, así como eran los que daban al mar, siendo estos el de la Concepción y el de Santiago.  En el interior de este se encontraba la Plaza de Armas, la parroquia de la Pastora, los conventos de San Francisco, de la Merced, de Santo Domingo y el de San Agustín. Funcionaban dentro de esta los siguientes hospitales: El Betlemita, el de Montes Claros y el de Loreto. Dentro de este recinto también se situaban las plazas de Caleta, la de Loreto, la del Muelle, la de Santo Domingo, las del Mercado y del Maíz. De relevante importancia la Casa de Cabildo.
La ciudad amurallada vista desde el mar 


Veracruz en la conquista Española...




La conquista española penetró en México por lo que hoy es el estado de Veracruz, arrebatando a los aztecas el señorío sobre los pueblos autóctonos veracruzanos y creando su propio dominio. Las primeras incursiones españolas en territorio veracruzano fueron capitaneadas por Juan de Grijalva, Alonso Dávila, Pedro de Alvarado y Francisco de Montejo.
 El Imperio Mexica fue una civilización tan próspera que fue la predominante en México. Esta se extendió de sobre manera por casi toda Mesoamérica, omitiendo la región maya, la civilización Tlaxcalteca y algunas otras regiones del Occidente del territorio mexicano. La conquista de este Imperio fue... La conquista de todo el territorio mexicano, debido a su gran importancia. Es por eso que, se pretende informar sobre el gran evento que cambió radicalmente la historia de las civilizaciones mesoamericanas.

Cabe mencionar que, los primeros españoles, llegaron a Mesoamérica de manera accidental. A consecuencia de un naufragio ocurrido cerca de Jamaica en 1511. Algunos de los sobrevivientes llegaron en canoas a las costas de Yucatán. Sin embargo, fueron aniquilados por los mayas. Salvo dos individuos: Gonzalo Guerrero y Jerónimo de Aguilar. Guerrero se adaptó a las constumbres mayas, se casó y tuvo tres hijos, a los que se les considera; los primeros mestizos entre la raza española y maya.
Jerónimo de Aguilar, en cambio, aceptó ser rescatado por Cortés en 1519, habiendo pasado 8 años ya en la isla de Cozumel. Jerónimo de Aguilar fue de gran ayuda durante la Conquista de México, pues fue el traductor de maya al español, mientras que, Doña Marina o La Malinche, traducía de maya al náhuatl.

Rutas seguidas por Gonzalo Guerrero y Jerónimo de Aguilar; Francisco Hernández de Córdoba; Juan de Grijalva.

Las primeras incursiones de los españoles en el actual territorio estatal fue por la expedición de 1518 capitaneada por Juan de Grijalba, que navego por el río Tónala (que bautizaron como río Santo Antón) y el río Coatzacoalcos. Pedro de Alvarado decide adentrarse en el río Papaloapan (bautizándolo en ese momento como río Alvarado) donde tuvieron contacto con pescadores nativos de Tlacotalpan, estuvo tres días por el Papalopan, esto causo un gran disgusto a Grijalva.
A lo largo de la navegación por el litoral del ahora estado de Veracruz fueron encontrando diferentes asentamientos. Llegaron a mediados de junio a una isla donde encontraron un templo y cuatro indígenas muertos, los cuales aparentemente habían sido sacrificados al dios Tezcatlipoca, por lo que el lugar fue nombrado Isla de Sacrificios. Desembarcaron en Chalchicueyecan. Ahí Grijalva preguntó el motivo de aquellos sacrificios. El intérprete maya chontal Francisco respondió que habían sido ordenados por los colohuas, pero la respuesta fue malinterpretada y se creyó que el lugar se llamaba Ulúa. Por la fecha que era 24 de junio, el lugar fue bautizado como San Juan de Ulúa. En el lugar rescataron oro con los totonacas. Para estas fechas era uno de los pueblos sometidos por los mexicas.
Días más tarde llegaron los calpixques Pínotl, Yaotzin, y Teozinzócatl, quienes acompañados de Cuitlapítoc y Téntlil, se presentaron como embajadores del huey tlatoani Moctezuma Xocoyotzin. En forma pacífica se realizaron intercambios de regalos. Grijalva pudo de esta forma percatarse que los aztecas —o mexicas— dominaban la región y que eran temidos y odiados por los pueblos sometidos. Pedro de Alvarado fue enviado de regreso a la isla de Cuba para notificar y entregar los tesoros obtenidos a Diego Velázquez.
Francisco de Montejo encabezó un viaje de reconocimiento al norte. Descubrió el río Cazones y el Nautla, lugar que fue bautizado con el nombre de Almería. Más adelante las embarcaciones navegaron el río Pánuco pero en este lugar doce canoas con nativos huastecos atacaron la incursión española, por lo que los capitanes decidieron emprender el regreso. Con una nave averiada el viaje fue lento, tomaron la decisión de no establecer ninguna guarnición.
Primeras Expediciones
Una expedición dirigida por Francisco Hernández de Córdoba tocó las ostas de Yucatán en 1517, y llegó a Campeche; la mitad de los hombres murieron por los ataques de los mayas.
Aunque, a decir verdad, ni Francisco Hernández de Córdoba ni Juan de Grijalva fueron los primeros españoles en pisar las tierras yucatecas. En 1511, la flota de Diego de Nicuesa había naufragado en las costas de la península. Como anteriormente se mencionó, Jerónimo de Aguilar y Gonzalo Guerrero fueron sobrevivientes de aquél percance. No obstante, a pesar de este primer naufragio, las expediciones de Hernández de Córdoba y de Grijalva fueron importantes porque inauguraron las primeras exploraciones voluntarias a tierra firme.
Si bien, ambos españoles emprendieron estas primeras expediciones, ninguno de ellos tomó la iniciativa de colonizar los territorios a los que llegaban. La historia de la conquista de tierra firme inició hasta la llegada de Hernán Cortés.

La Expedición de Hernán Cortés
Hernán Cortés había propuesto ante la Corona Española un proyecto de exploración interna al territorio mexicano, la cual fue aprobada y financiada por los reyes españoles.
Sin embargo, Cortés decide crear un acuerdo en Diego de Velásquez, regente del territorio cubano, para que este le proporcionase algunos individuos llevar consigo un ejército con mayor número de soldados a cambio de otorgarle una parte de las riquezas que este obtuviere. Finalmente, Diego accedió ante la propuesta.
El 18 de febrero de 1519 salió de Cuba el ejército de Hernán Cortés, a bordo de once barcos.  En Cozumel, Cortés rescató a Jerónimo de Aguilar.
En las costas de Tabasco fue atacado, sin embargo, alió vencedor y victorioso de dicha contienda. Tras haber sido derrotados, varios caciques de la región, hablantes de un dialecto maya, le obsequiaron a un grupo de mujeres, -de hecho veinte, para ser más precisos-, para que estas preparasen alimentos a la tropa española. Una de esas mujeres era Malinali, también llamada Malitzin, y luego nombrada por los españoles Doña Marina; se trataba de la famosa Maliche, que serviría como traductora de Cortés.
Cortés continuó su recorrido hasta llegar a un punto de la costa que le pareció propicio para el desembarco; allí instituyó el primer ayuntamiento de la historia colonial: la Villa Rica de la Vera Cruz. Al fundar dicho ayuntamiento, Cortés desconoce el tratado que hizo anteriormente con Diego de Velásquez.
Fundación de la Villa Rica de la Vera Cruz.

En este lugar, recibió los regalos que eran mandados de parte de Moctezuma. Confundiéndolo con una de sus deidades: Quetzalcóatl.
En Zempoala, Cortés pactó la primera alianza estratégica de la Conquista. El gobernante de dicha ciudad totonaca, deseoso de librarse de los opresores mexicas, ofreció a Cortés el apoyo de sus tropas.
Por otro lado, los tlaxcaltecas atacaron en varios parajes a Cortés y su ejército y, a decir verdad, estuvieron a poco de derrotarlo. Sin embargo, al advertir la dificultad de la lucha contra los españoles, los tlaxcaltecas cambiaron de estrategia preferenciando la paz. También esta civilización veía la conveniencia de aliarse con los españoles: la liberación de estos por el grupo opresor mexica.
                                  Ruta seguida por Cortés para llegar a México-Tenochtitlán.

La Llegada a Tenochtitlán
Después de haber pactado alianzas con los totonacos, los tlaxcaltecas y con un sector de la nobleza de Tetzcoco (Texcoco), Cortés arribó a Tenochtitlán en 18 de noviembre de 1519. Los españoles fueron recibidos como invitados de Moctezuma y hospedados en uno de sus palacios. Al cabo de unas semanas, Cortés comenzaba a sentirse nervioso por su vulnerabilidad dentro de la ciudad, así que, arrestó a Moctezuma y lo tomó como rehén.
 
Moctezuma apresado por orden de Cortés; este último acompañado de Doña Marina o La Maliche.

Mientras Moctezuma estuvo prisionero, Cortés tuvo que ir a Veracruz a enfrentarse a un grupo de españoles que llegaba a detenerlo, mandado por el regente de Cuba, Diego de Velásquez. La incursión de Cortés tuvo éxito y logró sumar a su ejército a una parte de los españoles que debían capturarlo. Pero durante su ausencia en Tenochtitlán, Pedro de Alvarado, que había asumido el mando, llevó a cabo una matanza de jóvenes durante una danza en el Templo Mayor los Mexicas, enfurecidos, sitiaron a los españoles. A su regreso, Hernán Cortés logró entrar de nuevo al centro de la ciudad para organizar la defensa, y quiso que el propio Moctezuma calmara a su gente, pero cuando el Tlatoani salió al balcón para intentarlo, recibió una pedrada en la cabeza, la cual, causó su muerte.
En vista que hubo una gran baja en el ejército de Hernán Cortés, éste comenzó a planear una huida. Los españoles salieron por Otumba rumbo a territorio tlaxcalteca. Quienes lo recibieron y abastecieron a su ejército para que éste se pudiese recuperar. Además de añadir a su ejército más hombres tlaxcaltecas.
Cabe mencionar que la Noche Triste aconteció el 30 de junio de 1520.


Noche Triste

Gracias a la instancia de los españoles en la cosmopolita ciudad, quedó entre la población el virus de la variola, causante de la viruela. Dicha epidemia arrasaba con los habitantes Mexicas.
De hecho, el Tlatoani Cuitláhuac (quien ocupó el trono después de Moctezuma) murió de viruela.

Cabe mencionar también que los indígenas no poseían anticuerpos contra varias enfermedades traídas por los españoles, pues, para ellos, eran enfermedades nuevas. Por ello, las primeras epidemias de viruela, de tifus exantemático, de rubéola y otras enfermedades, resultaron fatales en América.

Hay ciertas teorías que mencionan que la viruela llegó con un esclavo negro de Pánfilo de Narváez.

Según algunos testimonios históricos, los primeros contagios o aparición evidente de la enfermedad (síntomas) se dieron poco después de la Noche Triste (aunque, quizá, como breviario médico, cabe mencionar que el virus se encontraba en la población desde quince días antes de que fuese notorio, es decir: la aparición de síntomas, lo que me lleva a suponer que el contagio se dió desde mucho antes de la Noche Triste, y que, posterior a ella, comenzaron a hacerse aparentes los síntomas de dichas enfermedades).

Se menciona que entre 1518 y 1540, los indios de Nueva España vivieron tres grandes epidemias de la enfermedad, lo que conllevó un descenso de la población, mostrado en datos demográficos.
Y, hacia 1580, ya había muerto el 80% de los habitantes.

Tenochtitlán, consecuentemente, se debilitaba más, dando a los españoles mayores oportunidades de conquistarlos.

Los Mexicas instauraron, como nuevo Tlatoani a Cuauhtémoc.

Los españoles con sus aliados construyeron trece barcos bergantines (barcos de dos palos y vela cuadrada o redonda) y tan pronto como los tuvieron en el agua, pudieron garantizar el aislamiento de la capital imperial.

La ofensiva naval anuló la principal defensa de Tenochtitlán, que era su sistema de canales y puentes levadizos.

Finalmente, hubo grandes bajas en ambos bandos. El sitio duró dos meses y medio, y concluyó cuando los españoles lograron capturar a Cuauhtémoc, pues qué era un pueblo sin su Tlatoani. (a éste tlatoani le fueron quemados los piés, pues los españoles creían que tenían un tesoro y pensaban también, que torturando al tlatoani conseguirían dicho tesoro.)
(Frase de la Profra. Dany, un poco modificada, omitiendo el ejemplo que consistía en que Víctor era el tlatoani): "Si te hechas al Tlatoani a la bolsa, también te hechas al pueblo..."
En fin, los españoles obtuvieron la rendición del pueblo mexica el 13 de agosto de 1521.

Quema de los pies de Cuauhtémoc

Cabe mencionar que los mexicas estaban profundamente desmoralizados, pues la verdadera conquista consistió en el arrebato de sus costumbres y tradiciones.

Entre 1521 y 1525, Cortés organizó la reconstrucción de la Cd. de México.
Sin embargo, al regresar a España, no obtuvo los méritos que él creyó correspondientes.